terça-feira, 12 de outubro de 2004

Iziane escreve Experiencias en Ekaterimburg.

Desde que llegué aquí, el día 20 de septiembre, todo han sido buenas y positivas vibraciones. Aunque el viaje desde Miami, fue muy largo, con muchas horas de espera en el aeropuerto de Moscu, esperando el vuelo a Ekaterimburg, valió la pena, porque a mi llegada a la ciudad rusa, los directivos del club, me esperaban en el aeropuerto con ramos de flores y mucho, mucho cariño. Una vez hechas las presentaciones, me llevaron a mi apartamento, un edificio muy nuevo y moderno, con todas las comodidades.

Siempre tienes un poco de recelo cuando emprendes una aventura como esta, ya que desconoces el idioma, las costumbres, las condiciones de los clubes de estos países, pero realmente estoy sorprendida de lo grandes profesionales que son y de la estructura que poseen, no olvidemos que este club, ya quedó campeón de Europa hace tan sólo dos temporadas.

Después del necesario descanso, al día siguiente tuve dos grandes sorpresas, la primera, que tengo un coche con conductor, que siempre está dispuesto para llevarme al lugar que le pida, al igual que una traductora, que en todo momento me acompaña para traducirme cada cosa que la gente me habla. La otra sorpresa fue cuando me entregaron mi uniforme de juego, en el que mi apellido, Castro, está escrito en ruso, así que para los curiosos, en mi camiseta, está escrito MAPKEC, este es mi apellido en su idioma.

A continuación, todo fue muy rápido, viaje con el equipo y con las que serán mis nuevas compañeras a la ciudad de Samara, donde jugamos un partido contra el potente equipo de la ciudad, probablemente uno de los mas fuertes de Europa, evidentemente perdimos, pero yo me encontré muy bien en el campo y anoté con bastante facilidad.

Bueno, que mas deciros en esta primera entrega, que estoy muy felíz de haber elegido esta oportunidad, las personas son muy amables y muy simpáticas, y siempre quieren ayudarte. La comida es bastante buena y realmente puedes encontrar de todo en los supermercados.

Aunque el idioma es muy difícil, por el momento no está siendo una barrera infranqueable, ya que el lenguaje del baloncesto es internacional y siempre mis compañeras están intentando ayudarme, bien con algunas cosas en inglés, o bien con signos, nada difícil de superar, aunque pronto comenzaré clases de ruso y seguro que comenzaré a hablar mis primeras palabras rapidamente. Ya os enseñaré algunas cosas.

La ciudad es bastante grande, siempre hay mucho tráfico y mucha gente por las calles, pero mi conductor es bastante agresivo, así que llegamos siempre puntuales a cada lugar al que tengo que ir, no hay problema.

El clima, es muy frío, ahora hace entre 4 y 7 grados, pero me dicen que en invierno, la nieve está casi permanente y que las temperaturas llegan a -30º, así que tendré que prepararme para ello.

Muchos besos y abrazos a todos cuantos sigan mi carrera deportiva, que durante los próximos ocho meses será en la liga rusa, así que pronto os estaré escribiendo sobre las nuevas aventuras que me vayan sucediendo.


Fonte: Prodep

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